Muchas de las enfermedades extendidas hoy en día en los países del primer mundo, entre las que destaca el cáncer, se deben en gran medida a la increíble cantidad de tóxicos que respiramos e ingerimos diariamente. Muchas de las sustancias tóxicas que comemos o bebemos proceden de los pesticidas, fungicidas y herbicidas contenidos en los alimentos de producción convencional.
Los pesticidas y herbicidas se utilizan en multitud de lugares. Tanto es así que en muchas ocasiones estamos expuestos a ellos sin ni siquiera saberlo.
Los pesticidas y herbicidas que pulverizan en campos y huertos permanecen en la fruta o verdura que entra en nuestro organismo al ingerir estos productos. Los productos químicos aplicados en campos de golf, jardines públicos y privados pueden llegar a filtrarse y acabar en acuíferos. Puede ocurrir que los sistemas de filtración no consigan eliminar algunos de estos contaminantes y terminamos bebiendo, cocinando con ellos o simplemente exponiéndonos en la ducha o el baño. Además, los químicos que se utilizan como plaguicidas domésticos pueden también finalizar en nuestro cuerpo a través de la respiración o absorbido por la piel.
Una vez que se encuentran en nuestro organismo, estos "venenos" suelen ser duraderos y tienden a acumularse en tejidos grasos, incluyendo el tejido mamario.
Quizá la demostración más clara sea el caso de Israel, que redujo considerablemente las tasas de cáncer al prohibir en 1978 tres pesticidas estrogénicos .
La alternativa a este experimento al que nos vemos sometidos involuntariamente es la alimentación ecológica, cultivada sin elementos químicos, sostenible y respetuosa con el planeta por muchas razones. Y si fuera poco hay investigaciones que han demostrado que en los productos ecológicos tienen de media más de un 80% de nutrientes.
Por todo ellos es importante conocer cúales son las verduras que contienen un nivel más alto de pesticidas, para priorizar en nuestra compra ecológica.
Frutas y verduras con nivel más alto en pesticidas: apio, cerezas, uvas, nectarinas, manzanas, melocotones, peras, patatas, fresas y espinacas.
Frutas y verduras con nivel más bajo en pesticidas: kiwi, espárragos, aguacates, plátanos, brócoli, coliflor, mangos, cebolla, papaya y piña.